Diagnósticos que pretenden: identificar plenamente a las partes involucradas en las relaciones; precisar cuáles son las aspiraciones de cada parte y, si existieren incompatibilidades que configuren conflictos, precisar sus características; determinar el estado de las comunicaciones entre las partes; e identificar cualquier otra variable crítica que pueda incidir en la condición actual y en la futura evolución del conflicto.